domingo, 11 de marzo de 2012

MEMORIA

Siddhārtha Gautama



La historia de alguien
que nunca quiso ser venerado como un dios,
pero que cambió para siempre
el curso de la historia de la humanidad.

500 años antes de nuestra era,
un joven príncipe emprendió un viaje.
Un viaje a través del dolor
y el sufrimiento para alcanzar la sabiduría del todo .

Creció rodeado de enorme lujo. Recibió la mejor educación y formación posibles en su tiempo

Abandono todas las riquezas y dejo atrás a su esposa
y a su hijo.

Con la cabeza rapada y ataviado con un vestido amarillo,
sin dinero ni bienes de ninguna clase,
se fue en busca de luz.

En su camino aprendió diferentes técnicas de meditación
y logró altos estados de conciencia.
En un intento por doblegar totalmente al mundo sensorial,
probó a someterse a austeridades tan extremas que casi ocasionaron su muerte,
pero aun así tampoco encontró un camino .

Tras días sin comer ni beber, a punto de desfallecer,
pocos minutos antes de su muerte,
escucho a un maestro que estaba enseñándole
a una niña a tocar la Cítara.

Le decía que si la cuerda esta muy floja no suena,
pero si esta se encuentra muy tensa se rompe,
la cuerda debía estar en su justa tensión para que pudiera dar música y armonía;

y en ese momento el príncipe comprendió el camino del medio..
Que tanto el ascetismo extremo como la vida de placeres del palacio eran dos extremos y que la verdad se hallaba en el justo medio; todo en su justa medida.


Con esto se fundo la primera religión de la tierra.
Una religión que no lo es.
Sin dios y que niega la existencia del alma.

Es la historia de Siddhārtha Gautama
(en sánscrito सिद्धार्थ गौतम ) mas conocido como Buda.